La quita de cargas aerodinámicas, además de ser un retroceso tecnológico muy grande (la última vez que corrieron así fue en 1994), hundió a Chevrolet al fondo del mar y esto despertó un malestar por parte de sus pilotos. La marca del moño ya sufría con el reglamento utilizado hasta Olavarría, pese al triunfo de Matías Rossi allí, el cual quedó después de los dos grandes cambios que se hicieron el año pasado. Y ahora que no tienen el babero delantero y el spoiler trasero, directamente no existen. ¿Por qué? Porque en la clasificación el mejor Chivo fue Sergio Alaux, quien se ubicó 19° a 1s440 del poleman. Y en la Final, Mariano Altuna fue el más destacado con un 20° puesto.
La ACTC tomó esta iniciativa con el fin de mejorar los espectáculos de las carreras, un faltante que todo el automovilismo autóctono trata de resolver… El departamento técnico decidió quitar las cargas y quedó en evidencia porque el gran lema de la categoría, que es siempre encontrar la igualdad de condiciones en todas las marcas para la alegría del soberano –que vendría a ser el público-, no se respeta... Alejandro Solga, jefe técnico de la ACTC, habló al respecto y aseguró: “A los Chevrolet los arreglo con 50 pesos”. ¿Qué quiso decir? Que con un pequeño fierrito en forma de L llamado Gurney se puede recuperar la estabilidad de la ida de cola. No obstante, en Río Hondo todo siguió igual y los Chivos no aparecieron. Solga, además, disparó que los usuarios de la marca del moño dorado están “psicológicamente disminuidos y se predisponen mal al trabajo”. Esto aumentó el enojo de la mayoría de quienes defienden la bandera de la marca. Hubo declaraciones irónicas, como la de Mariano Altuna. “No hay que decir que estamos complicados porque te mandan al psicólogo”, dijo el Monito. Y la completó: “Los seis primeros del campeonato somos de Chevrolet y por eso especulamos…”, burló. Otro que habló fue Christian Ledesma. “(En la ACTC) Son testarudos, porque prefirieron culpar al otro antes que hacer una autocrítica. Estoy indignado. Me siento desvalorado y que me faltan el respeto”, dijo el marplatense.
Sin duda, la ACTC algo tiene que hacer. Los usuarios del Chivo ya tienen una carrera menos en la pelea por entrar a la Copa de Oro y eso los inquieta. Aunque acaso lo que más les preocupa es que, el titular de la categoría, Oscar Aventin, sostenga que el motivo de esta problemática se debe a que “la merma de Chevrolet está en los motores porque la mano derecha de Laboritto se accidentó hace dos meses y no está trabajando con él ahora. Eso me lo dijo el propio Laboritto”, dijo el Puma, afirmación que después el preparador de Dolores reconoció que no era tan así, que quien tuvo el accidente fue un “colaborador que arma, nada más”... “Yo manejé Dodge, Ford y Chevrolet, y sin cargas aerodinámicas, como estamos corriendo ahora, Dodge y Chevrolet han tenido siempre una gran bondad”, agregó Aventin.
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